sábado, 26 de octubre de 2013

El trébol de cuatro hojas

Mi madre siempre decía que yo era una persona afortunada. Aun sin saber argumentar los motivos de su opinión, estaba convencida de ello. Es cierto que siendo niño encontré un reloj de oro, que gané con el colegio una Olimpiada cultural y que siempre salí indemne de las epidemias que rondaban la guardería. Pero a pesar de la ilusión atesorada, no conseguí ninguno de los premios que se sortearon en las fiestas fin de curso.
Siendo estudiante en la Facultad, un amigo de promoción insistió en esa letanía:
- Manuel, eres un tío con suerte.
En su caso puede que influyera mi condición de atleta universitario, tener los veranos tranquilos por no dejarme asignaturas para septiembre o el haber aprobado a la primera aquellas oposiciones que le resultaran tan inaccesibles. Sin embargo, y aun a prueba de mi insistencia, no alcancé a bailar nunca con la chica más guapa de la clase.
Incorporado al centro de trabajo, una compañera volvió a decirme lo mismo. Deambulando junto a ella por los pasillos del hospital, vislumbré un billete de mil pesetas y con él la invité a desayunar.
- ¡Qué suertudo! –repetía cada mañana al verme en la cafetería.
No obstante, al ser el licenciado más moderno, mi turno de guardias era el peor de la plantilla y su nómina mucho más generosa en incentivos.
Hubo un día, allá por el mes de junio del año 2001, en que medité sobre el estado real de ese don…

Nota: Párrafo perteneciente al prefacio titulado El trébol de cuatro hojas, incluido en mi libro "El amor azul marino".

sábado, 19 de octubre de 2013

En el Día Mundial contra el Cáncer de Mama

Hoy se celebra el Día Mundial de Lucha contra el Cáncer de Mama, una enfermedad que en España ha registrado un incremento en su incidencia  -44 casos nuevos de media cada día- y en paralelo una disminución de sus tasas de mortalidad -con un 86% de supervivencia a los cinco años, significativamente superior a la media europea- por primera vez en la última década.
Como médico y por supuesto como persona, quisiera manifestar mi solidaridad para con estas pacientes, adhiriéndome a la reivindicación de distintas sociedades científicas como el Grupo de Investigación en Cáncer de Mama de seguir apostando firmemente por la prevención, su diagnóstico precoz y la investigación, facilitando que las personas que lo padecen puedan acceder a los nuevos tratamientos más eficaces e individualizados. Y, cómo no, hacer mío el propósito de la Asociación Española contra el Cáncer, de "quitar el miedo a la palabra cáncer, porque después de él sigue habiendo mucha vida".

miércoles, 16 de octubre de 2013

Mis sesiones de cuentacuentos

De la "A" de cuentAcuentos a la "Z" de aZul. Ese es el título de la primera sesión de cuentacuentos que realicé, basándome en los relatos incluidos en mi libro "El amor azul marino". La estrené en Gijón, con motivo del X Salón del Libro Iberoamericano, allá por la primavera del año 2007. Siguieron Madrid, León, Valladolid, Zaragoza y otras muchas plazas, hasta culminar con aquella presentación en la Feria del Libro de Frankfurt en su edición del año 2010.
El amor en los tiempos del cuento -con la que realicé mi discurso de ingreso en la Asociación Española de Médicos Escritores y Artistas-, La vuelta al mundo en casi ochenta cuentos -que presenté, entre otros, al Certamen de Monólogos de Miguelturra "Memorial Darío González" del año pasado- o Cuentos del mundo son los títulos escogidos en mis siguientes sesiones, procurando atesorar en su conjunto un denominador común: la de contar para compartir.

lunes, 7 de octubre de 2013

Felices Fiestas del Pilar

Sean estas líneas para desear a todos los residentes, visitantes, maños ausentes -como es mi caso- y demás amigos de esa querida Zaragoza unas felices fiestas en honor de Nuestra Señora del Pilar, llenas de ofrendas, pasacalles, gigantes, cabezudos, conciertos, diversión, cuentacuentos...
A pesar de la distancia y de lo a gusto que también me encuentro en estas tierras leonesas, siempre la siento muy cerca. Por ello, cachirulo al cuello, brindo por unas fiestas con un millón de motivos para celebrar.